FISIOLOGÍA DEL DEPORTE

Por Randy Gage

Un juego de números

En épocas anteriores estar en forma era realmente importante. Permítanme irme unos cuantos milenios atrás, cuando la mayoría de los hombres todavía llevaban un montón de pieles en la espalda. Un día de trabajo consistía en perseguir gacelas para alimentarse, luchar contra osos y tigres dientes de sable, recorrer kilómetros para recoger bayas y acarrear madera seca hasta la cueva. Los que no tenían la capacidad física para hacerlo se morían rápidamente. El promedio de vida era de unos 20 años y ser abuelo era un acontecimiento muy raro. Aunque estoy seguro de que en aquellos tiempos los chicos tenían uno que otro combate para demostrar quién era el más fuerte, el concepto de “ejercicio” no existía.

Ahora vayamos al siglo XXI. Los hombres ya no necesitan hombros anchos para vivir unas cuantas décadas más. Saber manejar un programa de hojas de cálculo es mucho más importante que saber arrojar una lanza. Las mujeres ya no necesitan caderas anchas para sobrevivir. Necesitan la capacidad de hacer varias cosas a la vez, más que poder tener varios partos.

A lo largo de los siglos, el deporte y el ejercicio se han desarrollado para satisfacer ciertas necesidades innatas. Somos competitivos por naturaleza, las ventajas siguen siendo para el “ganador”, y nuestro cuerpo nos exige un mínimo de esfuerzo físico para el que fuimos diseñados originalmente. Sin esto, el organismo humano se deteriora rápidamente.

La naturaleza competitiva o los objetivos físicos de algunas personas van mucho más allá de simplemente mantener el cuerpo en forma. El atleta profesional cuyo modo de vida está ligado a su rendimiento, o el aficionado formal que quiere ver hasta dónde puede llevar su cuerpo, puede someterse a tensiones físicas que se acercan a las que soportaron nuestros antepasados.

Veamos algunas cifras.

15 – Es el número de veces que un atleta de resistencia consume más oxígeno que una persona que se la pasa todo el día en su sillón. El problema es que el aumento del consumo de oxígeno y la intensificación de los procesos metabólicos crean tremendas cantidades de residuos por la oxidación y los radicales libres. ¿Alguien quiere glutatión?

6 – Es el número promedio de años que dura la carrera de un futbolista profesional. ¿Qué les ocurre a estos muchachos? ¿Es verdad que sus habilidades disminuyen en este lapso de tiempo? No lo creo. Es la acumulación de lesiones y el abuso de sus músculos y articulaciones lo que los desgasta. Más allá de evitar las lesiones, los deportistas que se recuperan más rápido de sus lesiones son los que duran más tiempo. ¿Alguien quiere glutatión?

50 –  Es el porcentaje en el que disminuye la resistencia durante el ejercicio en las personas a las que se les ha administrado el fármaco BSO para reducir los niveles de glutatión. La resistencia está directamente relacionada con los niveles de glutatión. Los corredores de distancia especialmente entrenados han desarrollado la capacidad de elevar rápidamente los niveles de glutatión cuando lo necesitan. ¿Alguien quiere glutatión?

13 – Es el porcentaje del incremento de la fuerza muscular de los adultos jóvenes sanos que toman Immunocal, tal y como se demostró en un ensayo clínico doble ciego. (Por cierto, la diferencia entre el primer y el último lugar en la carrera de los 100 metros de los Juegos Olímpicos suele ser de 1 a 2%). ¿Alguien quiere glutatión?

100 – Es el porcentaje de atletas con “síndrome de sobre entrenamiento” que sufrirán un impacto inmunológico. ¿Alguien quiere glutatión?

300 – Es el porcentaje de proteínas que muchos deportistas de alto nivel consumen en comparación con el porcentaje que se recomienda para los adultos sedentarios. Los aislados de proteína de suero de alta calidad contienen todos los aminoácidos esenciales que necesitamos, tienen un alto contenido de aminoácidos BCAA (aminoácidos de cadena ramificada), como la leucina, que son ideales para el desarrollo de los músculos, y tienen altos niveles de arginina y lisina, que pueden estimular la liberación de hormonas de crecimiento, lo que también se traduce en crecimiento muscular. ¿Alguien quiere Immunocal?

¡Mis respetos a todos los que practican deportes a nivel profesional y a los deportistas amateurs de alto nivel! Sin embargo, los riesgos son evidentes: lesiones, tiempo de recuperación, nutrición adecuada, estrés oxidativo, inmunodeficiencia, enfermedades virales, artrosis… ¡la lista es larga! ¿Cómo lograr superar los riesgos?

En la salud, como en la vida, ¡se trata de un juego de números! Los hombres de las cavernas no sabían contar, no lo necesitaban. Nosotros, afortunadamente, podemos y debemos hacerlo. Usa los números a tu favor. ¡Cuenta con Immunocal!

Ah, sí… un número más para recordar:

1 – ¡Es el número de oportunidades que tienes para asegurarte de que tu cuerpo tenga una vida larga y saludable!

En caso no lo haya leído! Te compartimos nuestra última publicación

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